Bandas criminales ooperan con total impunidad
El sur de la ciudad vivió una noche marcada por el miedo. Una serie de ataques armados dejaron en evidencia la presencia activa de bandas criminales que operan con total impunidad.
Cinco sujetos armados, movilizados en dos motocicletas, atacaron de forma coordinada tres estaciones de servicio en los redondeles de Codesa y una más en el sector de El León. Los hechos ocurrieron durante la noche, sembrando el terror entre trabajadores y residentes.
Disparos, pánico y amenazas en panfletos
En una de las gasolineras ubicadas en Codesa, los delincuentes efectuaron al menos 18 disparos, hiriendo a una persona que fue trasladada de urgencia a una casa de salud. Los impactos resonaron por la zona, provocando confusión y temor entre los presentes.
Pese a la alerta emitida al Sistema ECU911, la Policía llegó 45 minutos después. Para ese momento, los atacantes ya habían escapado sin dejar rastro alguno. En el lugar de los hechos dejaron panfletos extorsivos, donde exigían grandes sumas de dinero bajo amenazas.
Comerciantes viven bajo amenaza constante
Este tipo de ataques no son hechos aislados. Se han vuelto parte de la rutina para quienes trabajan en el sur de la ciudad. Comerciantes y propietarios de negocios expresan su angustia, pero prefieren guardar el anonimato por temor a represalias.
Muchos de ellos se sienten frustrados, vulnerables y abandonados por la falta de respuesta efectiva por parte de las autoridades.
Mototaxistas, víctimas diarias de extorsión
El accionar de las bandas criminales también golpea directamente a los mototaxistas. Varios conductores denuncian que deben pagar dos dólares diarios a estas organizaciones solo para poder seguir trabajando.
Esta forma de extorsión sistemática reduce sus ingresos y los mantiene operando bajo un ambiente de constante inseguridad.
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Sin pronunciamiento oficial hasta el momento
Hasta el cierre de este reportaje, las autoridades no han emitido ningún comunicado oficial sobre estos ataques. Mientras tanto, la ciudadanía espera acciones concretas que frenen esta ola delictiva.
El miedo y la incertidumbre se apoderan del sur, donde los delitos se han vuelto una amenaza persistente que atenta contra la vida, la economía y la tranquilidad de sus habitantes.
